Parece una lucha de poderes, entre la persona y la diabetes. Pero en realidad, es más cuestión de decisión personal. Toma tú el mando: maneja la diabetes. El principal aspecto para manejar la diabetes es que la persona aprenda a participar en su control:Por qué necesitas tomar el mando
La diabetes es una enfermedad que se caracteriza por hiperglucemia, es decir, niveles altos de azúcar en la sangre. Mantener niveles elevados de azúcar en la sangre es la causa de las complicaciones de la diabetes. En cambio, si tú la manejas, ella no te causará complicaciones serias que afecten tu calidad de vida.
¿Cómo tomar el control de la diabetes?
Primero, reconoce que la diabetes es externa a él o ella. Uno no “es diabético”, sino es una “persona con diabetes”. Si “tengo diabetes”, puedo controlarla y actuar para prevenir complicaciones. Si “soy diabético”, es inherente a mí, no podría actuar para cambiar la situación. Absolutamente nadie que tenga diabetes quiere complicarse. Al contrario, todos los seres humanos queremos estar bien y mantener una buena salud. ¡Esto es posible, incluso si tienes diabetes!
• El segundo paso es
Luego, necesitas tener metas de control. ¡Necesitamos saber a dónde queremos llegar con el tratamiento! Entre las metas de control se encuentran:
- Mantener los niveles de azúcar alrededor de 100 mg/dl en ayunas y alrededor de 160-180 a las dos horas después de las comidas. Para esto, necesitas monitorear tus niveles de azúcar con frecuencia, de preferencia varias veces al día y entender cómo las comidas, el estrés, el ejercicio, el sueño, afectan la respuesta de los niveles de azúcar en la sangre.
- En todos los tipos de diabetes, la base del tratamiento es mantener un estilo de vida saludable. Esto incluye un plan nutricional y de ejercicio, además de evitar alcohol, tabaco y drogas. ¡No es necesario “morir de hambre” ni seguir dietas extremas! Se trata de llevar una vida saludable y balanceada, sin tener temor de comer. Al contrario, recuerda que debes consumir cantidades suficientes de cada grupo de macronutrientes, proteínas, carbohidratos y por supuesto, grasas saludables. ¡Una dieta sin grasas es una dieta poco balanceada!
- En muchos casos, necesitaremos utilizar medicamentos. También podemos aprender a lograr las metas de control al usarlos. Toma los medicamentos indicados por tu médico y evita auto-recetarte. Guarda horarios regulares para tomar los medicamentos y para tus alimentos. Debes tomar los medicamentos todos los días, en la misma dosis, no cambies (no bajes ni aumentes) de dosis sin indicación del médico
- Si usas insulina, asegúrate de aplicártela con la técnica correcta. Si está bien puesta, la insulina NO duele, no deja moretes ni elevaciones en la piel, no causa sangrados y sobre todo, te ayudará a mantener tus valores de azúcar en límites normales.
- Por último, un buen seguimiento con el equipo de salud resulta muy útil para prevenir complicaciones. Si se detectan los problemas temprano, es posible prevenir o retrasar la progresión de las complicaciones, para mantener la calidad de vida. Para esto, realiza una foto de fondo de ojo, un SUDOSCAN y pruebas de función renal, por lo menos una vez al año.
Toma tú el mando y maneja la diabetes, ¡no dejes que ella te maneje a tí!