La diabetes mellitus es una enfermedad crónica controlable. Las complicaciones son causadas por mantener la glucemia, o azúcar en la sangre, en valores elevados.
La causa de la diabetes es la falta de insulina, o la resistencia a su acción en el organismo. La insulina es una hormona que los seres humanos producimos todo el tiempo. Cuando no hay insulina suficiente, se origina la diabetes. Así que la insulina, a la vez de ser una hormona, es un medicamento.
Hay tres tipos principales de diabetes (aunque no son los únicos)
• La diabetes mellitus tipo 1. Ocurre cuando las células del páncreas no producen suficiente insulina para las necesidades del cuerpo. En este caso, la persona necesita usar insulina. Así repone la que su cuerpo no produce. Este tipo de diabetes puede ocurrir a cualquier edad, aunque es más frecuente en personas menores de 45 años.
• La diabetes mellitus tipo 2 es el tipo más frecuente de diabetes. En algunos casos puede relacionarse con la obesidad. No todas las personas con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso u obesidad. Sin embargo, los tejidos no responden bien a la acción de la insulina. Por esta razón, los niveles de azúcar se elevan en la sangre.
• La diabetes gestacional es la que ocurre durante el embarazo, por primera vez. En estos casos la madre no tiene suficiente reserva pancreática para producir insulina. Debido a que los requerimientos de insulina aumentan durante el embarazo, el azúcar en sangre se puede elevar
iabetes (en vez de ser diabético) o tener cualquier otra enfermedad crónica es algo modificable. No está dentro de su misma naturaleza, sino está separado de su ser. La persona sigue siendo persona, capaz de aprender, de cambiar su historia, de ser feliz, de tomar decisiones.
«Ser diabético» implica que la persona no puede modificar su historia: es colocar una etiqueta, un estereotipo con contenidos negativos. Tener diabetes implica que usted puede cambiar su historia, no necesita repetir las historias negativas que ha escuchado.